
Durante los últimos siete meses, el Ejército Nacional, en coordinación con la Fiscalía y la Policía, ha logrado golpes contundentes contra las disidencias de las FARC en Tolima. Estas acciones debilitaron sus estructuras criminales y redujeron su capacidad de financiamiento.
Captura de alias Gardel
En el corregimiento El Limón, en Chaparral, fue capturado alias Gardel, integrante del GAO-r frente Ismael Ruiz.
Durante el operativo se incautaron cartuchos calibre 5.56, panfletos, brazaletes y un celular. Tras la legalización, la justicia le imputó cargos por porte y tráfico de armas de uso privativo de las Fuerzas Armadas.
Diciembre a febrero: arsenal incautado y bajas
El 13 de diciembre de 2024 fueron capturados alias Jefferson, Willington y Cristian, señalados de pertenecer al frente Gerónimo Galeano. Se les incautaron armas, municiones y explosivos.
El 14 de enero de 2025, en Chaparral, el Ejército halló un arsenal con un mortero de 60 mm, 21 granadas y material de intendencia.
El 7 de febrero, en Rovira, murió alias Cancharino, cabecilla financiero. En el operativo también falleció su pareja y otro integrante resultó herido.
Abril y mayo: capturas clave
Tras la muerte de Cancharino, alias Fabián asumió las finanzas. En abril fue capturado junto a tres integrantes del frente Joaquín González, responsables de recaudar hasta 3.000 millones de pesos al mes por extorsiones.
En mayo cayeron alias Héctor, Useche, Zarco y Cura, vinculados a homicidios en Tolima y Huila.
Junio y julio: más operaciones
El 5 de julio de 2025, en San Juan de la China (Ibagué), fue detenido alias Danilo, cabecilla financiero del frente Joaquín González. Durante el operativo se incautaron armas largas y una camioneta con antecedentes por hurto. Alias Danilo ya tenía una condena previa de 55 años por secuestro y homicidio.
El 20 de julio, en otra operación, fue capturado alias Cortico, integrante del frente Gerónimo Galeano. Tenía en su poder una granada y panfletos del grupo ilegal.
Seguridad para el Tolima
Cada una de estas operaciones demuestra la articulación del Ejército con la Fiscalía, la Policía y la Fuerza Aeroespacial.
Con estos golpes, las disidencias en Tolima han perdido capacidad de acción, lo que fortalece la seguridad de la población y garantiza la presencia de la Fuerza Pública en el territorio.